B | Entre postas y malones

“La Posta y la llegada del tren” | 1850 – 1885

En este periodo, el Camino de Timoteo Gordillo cobra importancia. Mapas y réplicas de pinturas conservadas en el Museo Nacional de Bellas Artes nos permiten imaginar el paisaje rural de mediados del siglo XIX: postas, juegos, viajes, malones y cautivas aparecen en escena. A su vez, una fotografía de la Posta Los Leones describe cómo era el lugar que antecedió a la creación del poblado.

Algunas postales de la llegada del tren a Leones, en 1866, y un plano de 1886 dan paso a las distintas versiones sobre los orígenes del nombre “Leones” y de cómo se fue conformando la villa, dejando atrás a las postas y las amenazas de malones.

Este sector aborda un tiempo marcado por la disputa de territorios. Los diferentes recursos permiten conocer cómo las fronteras se fueron ampliando, relegando a los pueblos originarios para dar lugar al establecimiento de estancias, fortines, postas y estaciones de ferrocarril.

Una oportunidad para poner en debate el concepto sarmientino de “civilización y barbarie” y analizar de qué manera esa dicotomía aún sigue presente en nuestra sociedad.

Imágenes: facsímiles de “La vuelta del malón” (1892, Ángel Della Valle, Museo Nacional de Bellas Artes) y “El juego del pato” (siglo XIX, Ángel Della Valle, Museo Nacional de Bellas Artes). Fotografía de la vivienda de la familia Hernández y de la Posta Los Leones, a fines del siglo XIX. Estampita de la Virgen de la Merced, “patrona de los fortines” (colección MuHLI).

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